miércoles, 18 de julio de 2012

Capítulo 7

-Narra Chloé-

Me desperté sonriente, me duché, me vestí, me preparé, y desayuné. No tarde mucho en salir de casa, hoy el día prometía. Al llegar a clase Nayade, aún no había llegado, con lo cual, si que empezaba bien el día. Espere a Diana, y mientras la espera, cogí el móvil y se lo conté a Melody. Al terminar entró el profesor, y con el resto de alumnos. Menos mal que tengo reflejos, si no, ya no tendría móvil. Lo guarde y me dispuse a atender, pero me era imposible, estaba pensando en Niall, y en como lo besé. Las clases se me hicieron eternas, muy eternas, cuando por fin, me podía ir a casa a comer. A las dos manzanas del instituto, Nayade me había adelantado con el coche, y me ofreció subir. No iba a rechazar la propuesta, y subí. Cuando llegue a la puerta de casa me gritó.
+¡Oye Chloé! 
- Dime
+ Que voy a hacer una pequeña fiesta en mi casa, si te quieres pasar por ahí, serás bien recibida. -Sonrió- 
- Intentaré pasarme
+ Como quieras -Se encogió de hombros y arrancó- 
Entré en casa, comí algo liguero, hice los deberes, y le comenté a Diana lo de la fiesta. Accedió a venir conmigo. Me duché, me deje el pelo suelto, me puse un vestido rojo, con unos tacones altos negros, y una cazadora negra. Me puse un poco de rimmel, me alineé los ojos, y me pinte los labios de color rojo. Esperé a Diana en la puerta de mi casa y no tardó el llegar. Diana llevaba un vestido negro con un lacito fucsia, unos tacones fucsias, y los labios del mismo color, se había rizado el pelo y se había alineado los ojos. Una vez juntas, nos marchamos. Mientras andábamos hablábamos sobre que nos encontraríamos en la casa de Nayade y lo extraño que se nos hacía ir a una fiesta suya. 
+¡Eh chicas! ¡Esperadme!
Las dos nos giramos, y allí estaba mi bien formado vecino Liam. 
+¡Ag tía, es Liam! -Me susurró- 
Me reí. Liam nos alcanzó. Iba bien vestido, no muy arreglado pero no muy informal. Se había puesto unos vaqueros, con unas zapatillas rojas, una camiseta negra ceñida y la chaqueta del equipo. La típica chaqueta roja, con mangas claras, y las iniciales del instituto el la parte delantera, que en este caso eran la "M;H" 
+Estas muy guapa. 
-Me miro de arriba a abajo- 
+Tu también Diana. 
-Vaya gracias, tu también. 
Los dos sonreimos. Diana carraspeo la gargante y seguimos andando hacia la casa de Nayade. Tocamos a la puerta, y nos abrió con una sonrisa en la cara. Ya había ambiente cuando llegamos. Nada más entrar cada uno se fue a un sitio, quedándome sola. Liam estaba con Harry, Diana con sus amigas de francés y yo sola. Deprimente. Al ver que nadie quería estar conmigo, me acerqué a la mesa de bebida y me tomé un par de copas. Bailé un par de canciones. Me cansé de bailar y con una copa me senté en las escaleras, sola. Observe el ambiente, gente bailando, disfrutando, bebiendo, y... Enrrollandose. Alguien se sentó a mi lado. Me giré para ver quien era. Liam.
+¿Que haces aquí sola?
- Nadie quiere estar conmigo.
+Eso es mentira, yo quiero estar contigo. 
-Mentira. Has venido para no verme mal. 
+Porque me importas. 
Sonreí levemente. 
Se levantó, me extendió la mano, me levanté con su mano. Me agarró de la cintura. 
+Voy a besarte. Con lengua. Para que lo sientas. Si quieres que lo haga, asiente. 
Asenti. 
Me besó, con lengua, tal y como lo había dicho. Dudé un momento, pero al final entrelacé mis manos alrededor de su cuello. Y lo sentí. Se separó.
-¿Porque me has besado? 
+ Para recordarte que si quiero estar contigo. Si quieres que vuelva a recordártelo llámame.
Me quedé de pie, como una piedra, pensando mientras el se alejaba. Pasaron un par de minutos, y la gente me miraba de forma rara. Decidí bajar de las escaleras, y buscar a Liam. Diana me agarró del brazo.
+Tía, por ahí está Liam, te estás equivocando de dirección. 
- Tu tranquila, no me equivoco. Me ha besado. 
+ ¿Que te ha...? Pobre, dulce, ingenua y estúpida Chloé no creas que le gustas, estará bajo los efectos del alcohol. Además tienes a Niall
- Esté o no esté bajo los efectos del alcohol, voy a ir ahí, así que suéltame. Además, Niall es como... no sé, es algo raro, pero no es mi novio. 
+ ...
- No te das una idea de cuando tiempo he estado enamorada de Liam, es mi vecino desde la infancia, y desde la infancia siempre he sido invisible para él, por una vez, que se digna a hablarme o a acercarse, déjame disfrutarlo. 
Me solté el brazo y fui a la zona donde se encontraba Liam con sus compañeros. Todos al ver que me acercaba, pusieron una cara de rareza, y cuchicheaban sobre mí. Las animadoras, que casi todas salían con algún jugador de fútbol, me miraron mal. Liam no tardó en salir entre la multitud y hacer que apartaran la vista. 
- He venido ha recordarte, que existo. Y existo desde que soy niña. 
Se acercó a mi. 
+ Y lo sé. 
Me separé, lo cogí de la mano y me lo lleve al jardín. Había gente enrollándose hasta en los árboles, totalmente penoso. Más de uno estaba vomitando tras las flores, y alguno que otro ya estaría tirado en el suelo dormido del pedo que llevaría. Vi una hamaca, y me senté en ella. Liam no tardó en repetir el gesto.
+Dime, ¿a que venia lo que me has dicho antes?
- Viene a que no sé porqué ahora que tenemos 17 años te fijas en mí. Llevo toda mi vida enamorada de ti, y he tenido que ver como te enrollabas con una cada vez, he tenido que soportar unas cuantas fiestas en tu casa y yo en mi habitación, justo frente la tuya, viendo a la gente disfrutar, y tu llevarte a más de una a la cama mientras yo estaba completamente enamorada de ti en secreto. ¿Porqué ahora, que empiezo a fijarme en otro chico me besas?
Se acercó a mi, con la intención de besarme. Le coloco el dedo indice sobre sus labios, y lo aparto. 
- No me beses. Dímelo. ¿Porqué?
+ Vale, si de verdad quieres saberlo te lo diré. 
- Bien.
+ Me gustas. Y no desde este curso, si no desde siempre. Pero tu siempre fuiste muy reservada, y más estudiosa que yo. Las chicas como tú, siempre piensan que los chicos como yo somos unos cabezas huecas, que sólo queremos una pelota, barro y chicas con las que acostarnos, por eso nunca te hablé ni te invité a las fiestas, pensé que si lo hacía y rechazabas mi invitación me sentiría destrozado, y nunca me arriesgué a hacerlo. Hasta que desde la ventana de mi habitación vi como besaste a ese chico. Me sentó fatal, y decidí que era hora de arriesgarse. 
Lo miré a los ojos, y esos ojos marrones tan deslumbrantes brillaban de la sinceridad. Nos miramos fijamente, y poco a poco nos fuimos acercando más, y más, hasta que nuestros labios se rozaron suavemente, fundiéndose en un dulce beso.



-Narra Nayade-

Como cada mañana, me desperté, me duché, me vestí y me fui a toda prisa al instituto, ya llegaba tarde. Llegué justo cuando el profesor estaba entrando, como siempre, me senté al lado de Dayana, y como no de Harry. Después de muchas horas, por fin eramos libres de nuevo, hasta el día siguiente. Un par de manzanas más alejadas del instituto vi a Chloé andando, la invité a subir, acepto, y la llevé a casa. Antes de que se pasará a su casa, me acordé de una cosa.
- ¡Oye, Chloé!
+ Dime
- Que hoy voy a hacer una pequeña fiesta en mi casa, si te quieres pasar por ahí, serás bien recibida - sonreí, al final resulta que la muchacha era maja -
+Intentaré pasarme
-Como quieras - me encogí de hombros -
Arranqué otra vez y puse dirección a mi casa. Me duché de nuevo, me planché el pelo y me puse el vestido blanco de tirantes y unos tacones con plataforma a juego.
Ya había avisado a unos cuantos, así que supuse que no tardarían en llegar una multitud de gente en cuanto se corriera la voz. Empecé a sacar las botellas de alcohol, y algún que otro aperitivo.
Los primeros invitados no tardaron en llegar, como siempre, con más alcohol. Recibía a cada uno de los que venían en la puerta, con una gran sonrisa.
Vinieron algunos de mi clase, con algunos me refiero a Harry, Dayana, Liam, Diana y Chloé.
La gente se fue distribuyendo por toda la casa, en poco tiempo por lo menos había cien personas en la casa.
Cada vez, había más gente borracha e incluso había algunas que ya estaban en el baño vomitando. Lo que había que soportar. 
Subí al piso de arriba para ver quien o quienes estaban merodeando por ahí. Encontré a más de uno dándose el lote por las esquinas, pero no me importaba mucho. Pasé a mi habitación y lo encontré mirando las fotos que tenía desde que era pequeña hasta ahora con mis amigas, con un cubata en la mano, iba pedo.
-No has cambiado nada, sigues siendo muy guapa
+¿Qué haces aquí Harry?
-Me aburría abajo, ya se ha ido Dayana, ya no tengo nada con lo que entretenerme, así que he subido haber que tipo de habitación tienes
+Bueno, ya la has visto, bonita, ¿verdad? Pues nada, ale, fuera de aquí – lo intentó sacar a la fuerza apoyándome en su espalda para empujarlo, pero de repente, cuando llegamos al marco de la puerta se da la vuelta rápidamente, quedandose a unos milimitros de mi, podía sentir su respiración y su olor a alcohol – Harry, ¿qué haces? - dije un poco cortada -
-¿No lo ves? - dijo acercandose más a mi -
+Harry, Dayana
-¿Qué pasa con Dayana?
+¡Qué estás con ella, por ejemplo! - me separé de él, pero fue un intento fallido, me cogió de la cintura – Será mejor que te vayas... ¡Vete!
-¿Y si no quiero? ¿Qué me vas a hacer? Sé perfectamente que estas deseando que nos acostemos en esa cama, al igual que yo – dijo señalando mi cama -
+Harry, vete, vete ya – intentaba separarme, pero él se volvía a separar -
De repente, la música se apagó, y la gente empezó a salir de la casa. Me separé de Harry y bajé corriendo haber que había pasado.
Habían llegado, mis padres habían vuelto.
-¿Qué hacéis aquí? Pensaba que no volveriaís hasta mañana por la tarde
+Pues pensabas mal, señorita
· ¿¡Qué es todo esto?! - dijo mi padre bastante cabreado -
-¿Una reunión de amigos? - miré a mi alrededor, y no quedaba casi nadie, la mayoría se habían ido -
+Nayade, no somos tontos, esto es una fiesta – dijo mi madre intentando sentarse en algún sitio del sofá que no estuviera hecho una porquería -
- Que no, que no, solo he invitado a un par de amigos para... Para que me hicieran compañía, es que me da miedo estar sola en esta casa tan grande - les mentí -
· Claro, ¿y todo este alcohol? ¿Cómo ha llegado hasta aquí? Ahora me dirás que no es tuyo
- ¡Y no lo es! Que, no os preocupéis, en serio, volved al hotel, la noche es joven, cuando volváis todo estará tal y como lo dejasteis antes de marcharos 
+ Eso espero, porque si no te quedarás sin paga hasta que me acuerde 
Se iban a ir ya, estaban a punto de salir de la casa, cuando bajo Harry en calzoncillos y lo estropeo todo.
¬ Vamos preciosa, tu cama nos espera
· ¿Quién es este Nayade? Y lo más importante, ¿qué hace en calzoncillos? - de nuevo mi padre, estaba hecho una furia -
- Nada, déjalo papá, esta borracho, no le hagas caso
+Jovencito, será mejor que cojas tu ropa y salgas de mi casa
¬ No sin antes hacer mía a Nayade - me miró con la mirada perdida, estaba completamente borracho, cuando intenté mirar a mis padres para explicárselo, mi padre pegó -

sábado, 14 de abril de 2012

Capítulo 6


-Narra Chloé-

Salí de la última clase del día para poder irme a casa, pero primero fui al auditorio para coger mi guitarra. Cuando llege a casa comí tranquila, mirando la televisión, ya que mi padre estaba investigando y no quería molestarle.Hize mi rutina normal, nada del otro mundo. Me conecte al chat y hable con Melody, y porsupuesto con Louis. Era un chico muy simpático, y en tan sólo dos días habíamos cogido confianza. Estaba en mi habitación, tranquilamente cuando alguien tocó el timbre de casa.
-¡Yo voy papa! -Grite desde mi habitación-
Baje rápidamente las escaleras y abrí la puerta.
+¿Llego muy pronto?
-Mm... Ho-ho-hola niall, ¿que haces aquí?
+¿la guitarra, las clases?
-¡Dios! Que tonta, cierto. Pasa, muchacho pasa.
+Gracias.
-Ven, sigueme, mi habitación esta arriba.
~¿Quien es Chloé?
-¡Es Niall papa!
~¿Niall?
-Papa, es un amigo, me está ayudando a tocar la guitarra.
~¡Ahhhhh! ¡Cuidado eh!
-¡Papa por dios!
Niall me miro un tanto sonriente, mientras yo me estaba sonrojando.
+¿Porque te pones así?
-Por na-na-nada. ¿Subimos?
+Subamos.
Subimos a mi habitación y empezamos con la clase. No tarde demasiado en salir del cuarto. Bajé a la nevera y tome un vaso de agua, fui al baño para refrescarme la cara y arreglarme un poco.
+¿Estas bien?
-Si,ahora mismo subo, si quieres beber algo, abre la nevera, como si fuera tu casa.
+Gracias, pero te espero aquí.
Estuve cinco minutos en el baño encerrada, estaba muy confundida, me atraía pero en cierto modo también lo odioba, estaba nerviosa y cada vez me sonrojaba más, me entraba calor y necesitaba despejarme las ideas. Estaba esperando a que niall se fuera de la puerta. Me tumbe en el suelo para mirar si habían pies tras la puerta. Seguía ahí.
-Que dulce es -pensé-
Salí del baño.
+¿Estas bien Chloé?
-Si, perdona por la espera, ¿subimos?
+Claro.
Subimos y seguimos por donde lo habíamos dejado. Estuvimos media hora más tocando la guitarra, y aún no lo había mirado ni una sola vez a los ojos. Cada vez se acercaba más a mi.
-Niall, no te acerques más.
+Chloé...
-Siento algo muy fuerte por ti, pero aún no se porqué.
No me hizo caso, se seguía acercando, con lo cual yo me alejaba cada vez más, hasta que me quedé sin cama donde desplazarme, caí al suelo. Me levanté y me tumbe en la cama boca abajo, no podía mirarle, no podía estar cerca suya o no por lo menos sin sonrojarme muchísimo. No se cuando, pero cogió su guitarra y se marchó. Un par de minutos después me arrepentí de haberlo tratado así, y fui a buscarlo para pedirle perdón. Baje rápido las escaleras y corrí calle abajo.
-Lo siento... Enserio...
+¿Porque? ¿Porque me has tratado así?
-No lo sé, no puedo evitarlo, me da muchísima vergüenza que me veas sonrojada.
+¿Y porque te sonrojas?
-No-no-no-no lo sé... No soy capaz de mirarte a los ojos y no abrazarte, no soy capaz de estar junto a ti sin querer besarte.
+No nos conocemos casi, hablemos, tranquilamente, sin compromisos, ¿comamos algo, hace?
-Por supuesto.
Note como mis mofletes enrrojecian cada vez más.
+Te pones muy guapa cuando te sonrojas, no se porque te averguenzas.
Andamos durante un par de horas sobre las calles de Londres, hasta que se hizo de noche. Entonces me acompañó a casa. Habíamos quedado para pasar la tarde juntos mañana e intentar arreglar mi timidez y vergüenza. Una vez en la puerta de mi casa se acercó para despedirse, supongo que para darme dos besos, pero yo sólo quería uno. Sin que me diera cuenta le besé. El separó sus manos y rodeo mi cintura. Un sonido atornillante salió de uno de sus bolsillos, no le hicimos caso y seguimos besandonos. Note su sonrisa mientras me besaba, era muy dulce. Tuvimos que separarnos porque ya era la tercera vez que le sonaba el móvil.
+Mmmm... Es mi madre, tengo que irme.
-Siento haberte entretenido. -Dije lamiendome los labios-
+Da igual, ha sido genial.
Se acercó y volvió a besarme, esta vez con más fuerza, pero fue bastante más corto. Note su sonrisa. No quería que se marchara.
-Vete, no lo hagas más difícil -dije llevandome una mano a la cabeza, dramatizando la escena-
+He de marcharme... Nos vemos mañana nena -dijo con aire chulo-
-¿Nena? ¡Aiaiaii! Ya hablaremos de eso
Entré sonriente a casa, mi padre estaba preparando la cena. Subí a mi habitación me puse el pijama y baje a cenar. Estuvimos charlando sobre los primeros días de clase y si tenía nuevos amigos. Pronto terminamos, recogí la cocina y me fui a dormir. Me dormí con una sonrisa en la cara.

- Narra Nayade -

Salí corriendo de la última clase, estaba ansiosa por ir a comer con mi supuesto novio. Espere a Zayn al lado de mi coche, tal y como habíamos acordado mediante mensajes. Tardo sobre unos cinco minutos en llegar.
+ Lo siento, lo siento, el profesor no nos ha dejado salir antes
- Jajaja, no pasa nada, ¿nos vamos?
+ Claro, tengo hambre
Nos subimos en el coche, y pusimos rumbo a ninguna parte. Estuvimos dando vueltas por el centro de Londres buscando un buen restaurante. Al final optamos por comer en un Mcdonals. Nos sentamos en la terraza, todavía no hacia el demasiado frío como para meternos dentro. Estábamos solos. Zayn paso a por la comida, mientras yo me quede sentada. Estaba revisando los mensajes que me había enviado con Zayn cuando de repente una voz conocida pronuncio mi nombre.
+ ¿Naya? ¿Que haces ahí sola?
Alce la vista, y en efecto como había pensado era Dayana y Harry.
- Em, esperando la comida, ¿y vosotros?
+ Nada en especial la verdad, veníamos también aquí a comer
• Si, pero nosotros nos pasaremos dentro, que ya refresca
- Como queráis
No quería que se quedasen a comer con nosotros suficiente había tenido ya con la comida en el recreo.
Se marcharon a dentro, se sentaron en una mesa lejana, pero aun así se les podía ver. Nada mas irse ellos regreso Zayn cargado con dos bandejas
+ Anda, espera que te ayude jaja
- No hace falta puedo yo solo
+ ¿Seguro?
- Tan seguro como que me llamo Zayn
+ Jajaja, esta bien
Nos sentamos y empezamos a comer, no pudimos evitar hablar sobre la coincidencia de que Harry y Dayana hubiesen venido a comer aquí.
+ ¿Que hacen aqui? ¿Que pasa, que nos siguen o como? Jajaja
- Ojala y lo supiera jajaja... Dios, Harry me esta poniendo nerviosa, no para de mirarme
Era verdad, Harry con sus ojazos verdes tenia la mirada fija en mi, cosa que desde siempre me habia puesto nerviosa.
+ Ya veras como te quita la mirada de encima - dijo besandome -
Empezaba a cogerle gustillo a los besos de Zayn, eran cortos, pero apasionados, me gustaban.
Cuando terminamos de besarnos mire de nuevo a la mesa en la que estaban Dayana y Harry, y en efecto, Zayn tenia razon, aparto la mirada.
- Gra-gracias - dije sonrojandome -
+ Hoy por mi, mañana por ti, bueno mas bien seria, por la mañana por mi, a mediodia por ti jajaja
- Dios... Jajajaja, ya vas perdiendo la verguenza eh
+ Es que, no se, me das confianza
- Supongo que eso es bueno, ¿no?
Esta vez se sonrojo él, terminamos de comer y lo acerque hasta su casa, le di las gracias por todo lo que habia hecho por mi y me fui a casa.Estaba muy cansada como para conectarme al Facebook, así que no lo hice, me duché, me pusé el pijama, me sequé el pelo y me fui a dormir.

lunes, 9 de abril de 2012

Capítulo 5

-Narra Chloé-

Tardé en dormirme, la curiosidad me podía. Di vueltas hasta tarde, pensando en que buscaba mi padre, de vez en cuando se acercaba para comprobar que estaba dormida y en esos momento tenia que fingir, aunque no me gustaba mentirle a mi padre. Cada vez me venían ideas, una mas extraña que la anterior sobre la misteriosa búsqueda de mi padre, después de tanto pensar y marear la perdiz me dormí. 
+PIPIPI, PIPIPI! Son las 6:40de la mañana, de un miércoles, el cielo esta despejado y parece que va a brillar el sol.
-Maldito despertador...
Me levanté de mala gana, con frío, sueño y pensando en la noche anterior. Me duché rápido, me preparé y desayuné sola en la cocina. Antes de irme al instituto necesitaba saber que investigaba mi padre. Me acerqué al despacho, y rebusqué entre sus papeles, las libretas, folios, facturas y más papeles, hasta que encontré lo que buscaba. Una funda de plástico, "Caso Nayade". Cuando estaba apunto de averiguar sobre que escribía mi padre, se despertó. 
+Chloé? -Pregunto adormilado-
-Si papá?
+Que haces aun despierta? 
-Papá son las 7:20 de la mañana...
+Ah... Que buscas? 
-Nada! 
+Si quieres dinero mi cartera esta abajo
-Vale, gracias. 
+ Querías algo más? 
-No... solo que te fueras a dormir a la cama, si no vas a estar destrozado esta tarde.
+Gracias cariño .Dijo levantándose muy lentamente aun dormido- 
-Vale, me tengo que ir, nos vemos luego. 
-Te quiero papá! -Grité desde la puerta- 
Cogí dinero, cargué la guitarra y me fui al instituto,. Antes de entrar a clase pasé por el auditorio para dejar alli la guitarra. Entré a clase buscando a Liam con la mirada, me topé con Nayade, una sonrisa picarona y un tanto malvada. Me pregunté que le había ocurrido ya de buena mañana. Se sentó al fondo de la clase, sola. Supuse que estaria enfadada con Dayana.
Biología, la clase más eterna del día. La clase se me hacia interminable con las explicaciones del profesor y por supuesto cada uno estaba en su mundo. Las siguienbtes clases se hicieron un poco más amenas, hasta que tocó la sirena dejando al profesor de geografía hablando solo. Corrí hacia el auditorio, donde había dejado la guitarra. Al entrar vi a alguien sentado en el borde del escenario, con una guitarra, MI, guitarra. 
-EH! Que esa es mi guitarra
+Lo siento, pensaba que era de aquí.
-No pasa nada, por lo menos sabes tocarla y no la aporreas...
+Gracias. Toma, es tuya. 
-No, por favor, sigue. Quiero que me enseñes a tocar eso... 
+Claro! No hay problema, por dejarme usar tu guitarra
-Gracias!
+Ven, acércate. 
Me acerqué a aquel chico, dejando la bandolera en alguna butaca. 
-Perdona... te conozco? 
+Perdonada, no, creo que no. Soy Niall, encantado.
-Igualmente, soy Chloé. 
+Chloé Kalod? 
-Sí, la misma
+Eres aquella que se peleo el lunes verdad? 
-Ahora todo el mundo me reconoce por eso o qué? Hahaha, si soy yo.
+En la pelea no parecías tan simpática. 
-Ya... es que me sacó de quicio. Dejemonos de rollos. Enseñame a tocar eso, por favor!
+Nunca una chica tan guapa me había rogado... 
-Para todo hay una primera vez no? A mi nunca ningún chico, ni guapo ni feo, preferiblemente guapo me había enseñado a tocar la guitarra. 
+Siempre hay una primera vez. 
-Exacto. 
+Sube anda. 
Subí al escenario tal y como me había indicado y me senté a su lado. Me entregó la guitarra. 
+Ten. Coloca las manos... ahí, muy bien. 
Cogió mis manos, colocando las en la guitarra. Era un chico dulce, que desprendía fuerza y valentía, pero también cariño y amabilidad. Me ayudó bastante. Habíamos hablado del tema y se ofreció a darme clases en casa. Por supuesto acepté encantada. Me acompañó a clase, y decidimos vernos luego. 
Una vez en clase de música, copiamos partitura y nos pusimos a tocar. La hora se me pasó volando. Al tocar la sirena me emocioné bastante, me tocaba latín, la primera hora de la semana. Y aunque me tocara con Nayade, me hacia ilusión. Bajamos al departamento, donde la conserje nos acompañó a clase. En clase, había una chica alta, rubia con ojos oscuros, y un buen tipo. Supuse que sería la profesora. 
+Buenos días. Soy la profesora, me llamo Ariadna, Ari para vosotras. Adelante, sentaos -Refiriéndose a nosotras- 
No había mucha gente en la clase. Al ver donde se sentaba Nayade, me senté con ella. 
-Puedo sentarme? 
+Claro, al fin y al cabo, tendré que darte una oportunidad
Me sorprendí bastante al oír esas palabras de su boca. Unas palabras que no iba a rechazar. Me senté a su lado y la clase comenzó. Nunca había prestado tanta atención a una clase y me quedé de piedra al ver a Nayade escuchando a la profesora. De vez en cuando miraba al móvil, y respondía a mensajes. De reojo pude ver un nombre. Zayn. Entonces me entró curiosidad, por preguntarle no pasaba nada no? Quizás hasta me respondía.
-Quien es Zayn? -Le susurré-
Me miró con cara rara, pero me respondió en un papel.
+Es mi "novio"
-¿"Novio"?
+Sí. En realidad es un amigo pero...
-...?
+Porque te estoy contando esto a ti?
-Porque... soy maja?
+En verdad si lo eres, pero no quiero que nadie sepa que somos amigas.
En cierto modo tenía razón. Nadie debía saber que desde aquella confesión el el baño, nos llevábamos bastante mejor, y que nos podíamos hablar sin insultarnos, ni matarnos. La clase se me hizo efímera. 

-Narra Nayade-

Me desperté y me puse el uniforme, me maquille un poco y me fui sin desayunar al instituto, por el camino me compraría algo en algún Starbucks. Pare y me compre un café y un donuts, cuando salí vi a Zayn, el chico con el que estuve el otro día en el aula de castigo.
+Zayn! Hola jajaja
-Hola, Nayade, ¿qué haces aun aquí?
+Pues mira desayunando, ¿quieres? - dije ofreciéndole el donuts -
-No gracias, ya he desayunado
+ ¿Quieres que te lleve al instituto?
-Claro, jaja, ¿¡porque no?!
Nos subimos en el coche, y empezamos a hablar y a cantar como dos idiotas. Pero me lo estaba pasando bien. De repente, Zayn, se puso blanco y se quedo callado.
+Zayn, ¿te pasa algo?
-¿Ves a esa chica de ahí?
+Em, sí, ¿qué pasa con ella?
-Veras, estuve con ella hace unos meses y ahora me acosa, no me deja en paz
+Uuuooh, pero si tienes una admiradora ¡jajaja!
- Si jajaja, no hay manera de que me deje en paz
+ Pero yo te voy ayudar...
- Me das miedo, Nayade jajaja
+ Haces bien jaja
De repente el semáforo se puso en rojo, y la chica iba a cruzar el paso de peatones.
+ Oye, Zayn...
- Dime
Le bese, pero mientras le besaba miraba de reojo a la chica, estaba que echaba chispas. Me aparte y puse otra vez la vista en el semáforo y las manos en el volante y me empecé a reír.
- No sé de qué te ríes... - dijo sonrojado -
+ Veras, una forma muy rápida y eficaz de que una chica deje en paz a un chico es viéndolo como se besa con otra jajaja
- Chica lista jajajaja, me has quitado un gran peso de encima
+ No soy tan tonta como parezco jajaja
- No eres tonta y mucho menos lo pareces
+ Gracias jajaja
El semáforo se puso en verde y acelere. Llegamos al instituto a tiempo, fue entrar por la puerta y tocar el timbre.
- Hasta luego Nayade, y gracias por lo de antes
+ Adiós, y no tienes que darlas en serio jajaja
Me fui a la clase que me tocaba, me senté otra vez alejada de Dayana. No podía evitar sacar una sonrisa picarona, me había gustado el beso, tenía que admitirlo, el chaval no besaba nada mal.
Pasaba el tiempo, y se podría decir que atención lo que se dice atención no prestaba a la clase, estaba pensando en… Hay que admitirlo, estaba pensando en Zayn, no era mal chico, y teníamos mucha confianza y eso que nos conocíamos apenas de dos días. Recordé que en el coche, antes de ver a la chica y besarnos, nos intercambiamos los números. Le di al botón de “Actualizar” en WhatsApp, y ahí estaba su nombre, abajo del todo, Zayn Malik. Me apetecía hablar con él, pero me acababa de dar cuenta de que el profesor me había puesto la mirada encima, aun que no me dijo nada, estaba pendiente de mi, a si que tuve atender el resto de la clase.
Tocó el deseado timbre, esa clase era muy, pero que muy aburrida, aun que era biología y en sí la materia no era aburrida, el profesor hacía la clase eterna con sus explicaciones. Salí corriendo al baño en cuanto tocó, mientras me miraba el espejo, empecé a pensar en cuanto echaba de menos a Dayana, que puede ser que me dijera celosa, pero era mi amiga, aun que me jodiese mucho, tendría que perdonarla. A la siguiente clase me tocaba matemáticas, y estaba al lado de Harry y Dayana, a si que tendría que estar a su lado durante una hora, se me tenía que ocurrir algo rápido. Me dirigí a la clase y me senté en mi sitio. Dayana no tardó en llegar con Harry cogidos de la mano, tonteando y dándose besos, como no. Intente no mirarles, pero no pude, no podía ver como mi amiga se estaba dando besos con el tío mas engreído de la clase. No tardaron mucho en hablarme.
+Hola Naya – dijo sonriéndome –
-Hola Dayana – dije sacando una de mis mejores sonrisas –
+ ¿Sigues cabreada por lo que te dije?
-Em, no, ya no estoy cabreada
+ ¡Qué guay! ¡Volvemos a ser amigas! – dijo dando pequeños botes en la silla mientras aplaudía –
-Se podría decir que sí
Volví a mirar el móvil, y vi otra vez el nombre de Zayn, de repente se me ocurrió una gran idea.
+ Y, ¿cómo ha sido eso de perdonarme?
-Pues, una maravillosa persona me ha ayudado a darme cuenta de que tus errores son tuyos, no míos – dije mirando a Harry con asco –
+ ¿Ah, sí? ¿Y quién es? ¿Alguna de las chicas?
-No, mi novio
Vi como la cara de Harry se empalidecía por segundos, intentaba disimularla, creo, pero no lo conseguía.
+ Uh, eso no me lo has contado, ¿quién es? 
-No creo que lo conozcas, yo no lo conocía hasta hace poco
+Bueno, eso da igual, cuéntame TODOS los detalles
Empecé a montarme una película sobre cómo había conocido a mi “novio” y como era nuestra relación. Harry prestaba bastante atención a mis palabras, siendo que ni si quiera me miraba.
+Entonces, ¿cómo has dicho que se llamaba?
-Zayn, Zayn Malik
+Y ¿Cuándo piensas presentármelo?
•Bueno, cariño, deja de hacerle preguntas que la muchacha se va a agobiar
-¿A caso te molesta, Harry?
•No, para nada
+Harry, somos amigas, me tiene que decir todo esto y mucho más, que tu no escucharas
•Es decir, sexo
Pase del comentario de Harry y seguí hablando con Dayana, le dije que se lo presentaría en el recreo a sí que tenía que avisar como fuera a Zayn de toda esa historia, le envié un mensaje resumiéndole lo que me había tenido que inventar, el por qué de todo esto. No tardo en contestarme con un “Está bien, además te la debía por lo de la chica, “cariño” jajaja”. Menos mal que era un chico comprensible y lo entendió, si no fuera así no sé que hubiese hecho.
Tocó de nuevo y nos dirigimos las dos y Harry a la clase de geografía e historia, nos volvimos a sentar juntos, los tres, y seguimos hablando de ellos un poco y de mi y de mi supuesto novio. Se me paso la clase volando, sería tal vez porque no presté atención. 
Llegó la hora del recreo, después de haber desayunado, quede con Zayn para ir a por él donde estuviese y decirle en persona lo que había pasado y lo que tenía que hacer más o menos. Llegamos a la mesa donde estaba antes, y había venido Harry, cosa que no me hizo mucha gracia.
+Bueno, Daya, este es Zayn, mi novio, cariño, esta es Daya, mi amiga
-Encantado – dijo sacando su sonrisa de medio lado –
•No me extraña que te haya enamorado Naya, jaja – dijo riéndose en bajito –
¬ Y yo soy Harry, su… chico
-Un placer
+Ya que os conocéis, nos vamos, los dos, a hablar
•No, quedaros aquí, con nosotros
-Lo que ella diga – dijo rodeándome con su brazo por la cintura -
No pude evitar fijarme en la cara de Harry, estaba celoso, un tío más alto, más guapo y más todo estaría con su chica y conmigo en la misma mesa, mientras él iba a ser ignorado
+Está bien, nos quedaremos
Nos sentamos por parejas, Zayn y yo en un lado de la mesa, y Harry y Dayana en el otro. Zayn empezó a cogerme de la mano y a acariciarme el cuello y cosas así, hacía que se me pusieran la carne de gallina, lo hacía con tal delicadeza, que uf, era inevitable que no se te pusiera la carne de gallina. Mientras él hacía eso, yo le decía cosas al oído, pero no bonitas, si no de lo mucho que nos miraba Harry y tal, y lo celoso que estaba de él porque le había caído bien a Dayana, él no podía evitar sonreír o soltar alguna que otra carcajada, normal yo me estaba descojonando sola.
Tocó el timbre, teníamos que volver a clase, tenía que esperar a Dayana, la cual estaba un tanto liada entre los labios de Styles, en cuanto se separon nos miraron raro, no estaba muy segura de por qué lo hacían.
¬Tío, dale un beso, ¿no?
+Eso no es de tu incumbencia Harry
¬Entonces no me creo mucho esta relación que digamos
Nada más pronunciar esas palabras Harry, Zayn me cogió como en las típicas películas americanas, de la cintura y me dio un beso, un gran beso.
+Guau… - dije en voz baja – Bueno, ¿nos vemos luego no?
-Vale, adiós cariño, adiós parejita jajajaja
•Adiós Zayn encantada de haberte conocido
¬Adiós.
• ¿Se puede saber por qué eres tan grosero con él?
+Si vais a tener la típica discusión matrimonial, yo me adelanto
Y así hice, los adelante y antes de entrar a la clase recibi otro mensaje de Zayn, que decía “¿Te apetece quedar para comer hoy conmigo y con mi “novia”? Ella es muy dulce, te caerá genial. Besos, Zayn” yo le respondí con un “Claro, ¿te importa que lleve a mi “novio”? Creo que haréis buenas migas también. Kisses”.
Entre al aula de música, y me sente, copiamos una partitura y tocamos un poco, bueno, tocaron porque yo estuve hablando con Zayn durante toda la hora.
Toco la sirena, y tocaba latín, por fin, estaba deseando empezar esa clase, me entusiasmaba bastante la materia. Bajamos a conserjería y el conserje nos acompaño hasta la clase donde daríamos la asignatura, cuando entramos ya estaba ahí la profesora.
+Buenos días. Soy la profesora, me llamo Ariadna, Ari para vosotras. Adelante, sentaos -Refiriéndose a nosotras- 
Solo había chicas en la clase, la materia no les llamo mucho la atencion, pero seguro que si supieran cual era la profesora no tardarían en apuntarse. Me sente cerca de la mesa de la profesora y cerca de la pizarra. Vi a Chloé que se acercaba hasta mi mesa
-Puedo sentarme?
+Claro, al fin y al cabo, tendré que darte una oportunidad
Se sento a mi lado y estuvo atendiendo durante toda la clase, yo también atendia pero de vez en cuando miraba si Zayn me habia respondido, creo que Chloé se dio cuenta y me pregunto por él
-Quien es Zayn? - me susurró -
Le miré con una cara un tanto extrañada, pero le conteste por papel
+Es mi "novio"
-¿"Novio"?
+Sí. En realidad es un amigo pero...
-...?
+Porque te estoy contando esto a ti?
-Porque... soy maja?
+En verdad si lo eres, pero no quiero que nadie sepa que somos amigas.
No sé si ella penso lo mismo que yo, pero desde aquella charla en el baño hablabamos como personas normales, sin gritarnos ni tirarnos de los pelos. La clase se me paso volvando, era agradable.